Solo un 2 % de la población española puede permitirse tener hepatitis C
¿Qué es el melanoma exactamente? 4.000 millones de euros en volumen de negociosSovaldi® es un medicamento contra la hepatitis C que es eficaz en un 90% para curar la enfermedad en asociación con otras moléculas. Sovaldi® cuesta por sí solo unos 25.000€ por paciente en España, por un tratamiento de tres meses -la duración mínima-, según datos de IS Global. En términos absolutos, si este medicamento no lo asumiera la sanidad pública, sería necesario ganar al menos 8.333 € al mes para poderlo costear. Teniendo en cuenta que el salario medio bruto en España es de 1.640 euros mensuales, una persona tendría que ganar casi 6 veces más para podérselo costear. Sólo el 2,78% de contribuyentes que declaran ingresar entre 60.000 y 150.000€ al año podrían permitírselo.
El coste es de hecho más elevado, puesto que hay que tener en cuenta el precio de la combinación terapéutica y la duración del tratamiento, que puede ser superior a los tres meses.
Ciertamente, esta situación es ficticia, porque la sanidad pública se hace cargo de financiar los medicamentos para las personas tratadas actualmente por la hepatitis C con estos nuevos medicamentos y estas no tienen que pagar nada. Pero, ¿hasta cuándo? Esta es la cuestión de fondo que plantea Médicos del Mundo: aceptar la lógica económica actual llevará a un gasto insostenible a largo plazo para poder tratar efectivamente a todas las personas infectadas de forma crónica por la hepatitis C.
Aunque al parecer España ha conseguido rebajar el coste hasta los 13.000€ por tratamiento en función del volumen de compra, el peso para las arcas públicas españolas sigue siendo tremendo, sobre todo cuando se estima que el mismo tratamiento podría prestarse por unos 265€. Así, a pesar de que España es uno de los países europeos que ha conseguido el mejor precio, el tratamiento de 12 semanas cuesta unos 13.000 euros por paciente (48 veces más).
A este ritmo, nos daremos de bruces con la realidad, sobre todo si añadimos los precios escandalosos de los medicamentos para el cáncer, con un potencial de varios centenares de miles o millones de personas afectadas.